19 mars 2010

Tango Negro y el maestro Juan Carlos Cáceres - París

Un post de deuda por una noche estupenda en el taller del maestro Juan Carlos Cáceres en París. Urgando en las verdaderas raíces negras del tango, este agentino polifacético de larga vida en París ha logrado una fusión de sonidos afroamericanos con el tango que normalmente estamos acostumbados a oír. Con ello, el resultado se acerca, además de a una justa reivindicación de orígenes ocultados durante décadas, a lo que en sus inicios debía oírse en los muelles, tabernas y ambientes populares del Puerto de la Plata.

Llegamos al local de Tango Negro (la asociación fundada por Cáceres, sita en el 71 de la rue Rochechouart) de la mano de Jorge Masetti y su equipo de filmación que montan el descomunal y atractivo proyecto de la sorprendente historia del tango. Un grupo de músicos formado por el percusionista (y pintor) Guillermo Venturini, el bandeonista Pablo Nemirovsky, el pianista Marcos Delprato y la cantante Gloria Marco, todos argentinos de París, interpretó unas piezas con arreglos tan savoureux que, o bien no conozco nada de tango o esto no se parece a lo que siempre he oído como tal.

En medio de aquella auténtica descarga argentina aterrizó un acordeonista eslavo impresionante. No sabíamos que era búlgaro pero Ramón Alejandro, siempre de un humor de mil diablos, lo adivinó por las piernas de su mujer cuando dijo que como esas sólo se veían en los filmes búlgaros de las koljozianas del Gran Trigal al norte de Sofía. Bingo! De ahí venían.


El maestro Juan Carlos Cáceres jazzea, tanguea, tropicaliza, cuenta y ofrece una auténtica descarga después de cada espectáculo ofrecido por Tango Negro