8 mai 2012

Albarracín en los confines de Aragón

© Fotos William Navarrete

Albarracín es fotogénico como quiera que se le mire o se le fotografíe. En los confines de Aragón el pueblo se erige entre montañas de la sierra que le dio nombre, muy cerca de los Montes Universales, al oeste de Teruel. Aunque no posee grandes monumentos, lo monumental en él es la homogeneidad y el estado de conservación de su pasado medieval y mozárabe. Las murallas son espectaculares, su Plaza Mayor hermosísimo en sus modestas dimensiones, el torrente que circunda y baña sus pies de una belleza indescriptible. En Albarracín lo mejor es perderse sin rumbo preestablecido por sus callejas y plazuelas, empujar puertas, encaramarse en sus numerosos miradores, respirar su aire puro y disfrutarlo intensamente en cualquier momento del día. No ha de extrañar a nadie que el pueblo haya sido declarado como uno de los más bellos de España. Se desarrollaba un festival de jotas aragonesas, cantadas y bailadas, en su Plaza Mayor. Luego de disfrutar del pueblo se impone un recorrido por la sierra. Los bosques de pinos de altitud son admirables.









Festival de jotas aragonesas en la Plaza Mayor de Albarracin.